Pedro Sánchez dispuesto a pactar con el PP

Una vez controlada la pandemia, la prioridad del Gobierno es sacar adelante los presupuestos para impulsar la economía, gravemente afectada por los efectos de la crisis sanitaria. Ciudadanos parece dispuesto a apoyar a los socialistas para que así sea, aunque exige que el Gobierno se aleje de las posiciones más radicales de Podemos.

El Gobierno por su parte, ha dicho a Podemos, que habrá que adaptar el acuerdo a la situación actual en la que también entran en juego otras formaciones. Y el problema radica precisamente en eso, en que el apoyo de un partido supone el veto a otro, y encontrar el equilibrio es ciertamente complicado.
 
El PP por ejemplo, está dispuesto a negociar con el PSOE, siempre y cuando renuncie al apoyo de Podemos, de los independentistas catalanes y los nacionalistas vascos y se alíe con los partidos constitucionalistas. 

El PSOE está dispuesto a llegar a acuerdos con el principal partido de la oposición en cuestiones económicas, sanitarias y sociales, después de la propuesta de pacto económico ofrecida por Pablo Casado. Pedro Sánchez aseguró en el Senado que "Si quieren apelar a la unidad, el Gobierno de España recoge el guante y, claro que sí, estamos dispuestos a hablar, dialogar y acordar con ustedes".

El presidente ha asegurado que podría crear una comisión de evaluación mixta de las dos Cámaras para analizar la pandemia, ver qué ha fallado y qué se puede hacer si vuelve a ocurrir en el futuro. La aprobación de los Presupuestos es la única manera de garantizar la estabilidad del Gobierno durante el tiempo que queda de legislatura.

Por otro lado ERC se muestra incompatible con Ciudadanos y asegura que un acuerdo con ellos supondrá que los independentistas complicará el acuerdo. Gabriel Rufián ha asegurado que una cosa es ceder y otra el chantaje y que pactar con un partido de derechas choca con cualquier medida justa de la izquierda. Ha conminado a Sánchez a elegir entre ellos y la formación naranja.

El PNV de momento no se ha decantado y antes de apoyar al PSOE, esperará a ver el techo de gasto y la propuesta de presupuesto del Gobierno, aunque se muestran dispuestos a negociar.

Vox, por su parte, se niega a pactar con el Gobierno, que a su vez lo hace con partidos como Bildu o los independentistas.